Agradecemos al profesor Norberto Ovando, que tuvimos el agrado de escucharlo en el III Foro Latinoamericano de Desarrollo Sostenible en Rosario. Él es Presidente de la Asociación Amigos de los Parques Nacionales (AAPN), Experto en la Comisión Mundial de Áreas Protegidas (WCPA) de la IUCN y miembro de la Red Latinoamericana de Áreas Protegidas (RELAP).
Tengan presente que como él, todos nos pueden enviar sus notas que con mucho gusto publicaremos en nuestra web.
Científicos de
todo el mundo han advertido sobre el fuerte aumento de la actividad volcánica y
de incendios forestales en la Tierra. Los sistemas de vehículos aéreos no tripulados de
hoy pueden llenar un vacío importante entre inspecciones de a pie e
inspecciones aéreas tripuladas.
Losvehículos
aéreos no tripulados(VANT), más conocidos como Drones, son
una excelente herramienta para
el cuidado del medio ambiente, el monitoreo ambiental, la
meteorología, detección de actividad volcánica o incendios forestales.
La denominación «vehículo aéreo no
tripulado» -VANT, proviene del inglés «Unmanned Aerial Vehicle»- UAV.
Es también muy usada la denominación «sistema aéreo no tripulado», «Unmanned
Aerial System» - UAS.
Más extendido es el término inglés «drone»
(literalmente zángano), que puede asimilarse como palabra española con el
singular «dron»
Estas
aeronaves por su configuración física, mecánica, electrónica y de software son
capaces de desempeñar una infinidad de tareas a más bajos costos de operación y
sin el peligro de pérdidas humanas por accidentes. Cuentan con equipo
electrónico como, DGPS (sistema de posicionamiento global diferencial),
brújula, altímetro, giroscopio, sistema telemétrico de comunicación para
trasmitir video y datos en tiempo real, cámaras digitales de alta resolución, y
con cámaras térmicas o infrarrojas según sean sus necesidades.
Hay una amplia variedad de formas, tamaños, configuraciones y características de drones que pueden ser teleoperados o funcionar de forma autónoma.
Vigilancia del medio ambiente
Los
drones (aviones no tripulados) tienen el potencial de aportar grandes beneficios
medioambientales. Volando rápidamente sobre reservas de vida salvaje se hacen
recuento de los animales, se pueden prevenir actividades ilegales como la caza
furtiva y descubrir a los cazadores furtivos, los drones están ayudando a los
conservacionistas a proteger las especies en peligro en todo el mundo. También pueden controlar los santuarios marinos y
otros ecosistemas protegidos sin la interferencia humana.
La
agricultura es otro de los sectores que se beneficia de estos dispositivos ya
que pueden monitorizar los cultivos y vigilar que no desarrollen enfermedades.
También se pueden Identificar,
documentar y vigilar el patrimonio arqueológico.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica
(NOAA) de los EE.UU., ha estado utilizando los sistemas de aeronaves no
tripuladas desechables y prescindibles para realizar un seguimiento de clima de
alto impacto tal como ciclones tropicales y huracanes.
También
pueden ser útiles en monitorizar los
bosques, detectar áreas deforestadas, medir la contaminación del aire, vigilar
las costas marinas y cualquier zona de riesgo; esto incluye controlar volcanes,
grabar sus erupciones, o detectar incendios forestales prematuramente,
determinar con exactitud el foco del fuego y ayudar a los bomberos.
Exploración
de volcanes
En entornos de alto riesgo dotado de
la tecnología adecuada,
los sistemas UAVs constituyen instrumentos eficientes y seguros
para observar y evaluar el comportamiento de formaciones, contribuir a la
predicción o verificación de la actividad volcánica. La captura detallada de
imágenes y videos posibilita trazar un mapa termal de la cumbre y compilar los
datos adicionales que se requieran en cada oportunidad, estudiar los
movimientos de los ríos de lava, medir y comparar concentraciones de sustancias
en el aire etc., aportando multitud de información en pocas horas de vuelo; Sin verse afectado prácticamente por los humos y
residuos que el volcán lanza a la atmósfera.
Los UAVs ante situaciones de peligro
pueden moverse rápidamente a cualquier otra posición requerida o dejar la zona
en segundos si es necesario.
Detección y control
de incendios
Los
incendios forestales, cada año destruyen cientos de miles de hectáreas de
bosques, reservas naturales y pasturas. Esta situación pone en riesgo vidas
humanas, produce cuantiosas pérdidas materiales y graves daños ambientales. Es
clave contar con información en tiempo real de condiciones meteorológicas,
sequías, actos de vandalismo entre otras variables para detectar y controlar
focos de incendios en sus etapas iniciales.
Los
UAVs pueden ser de vital importancia ya que pueden sobrevolar zonas, en muchos
casos rugosas y de difícil acceso, haciendo controles de rutina preventivos o
bien tomando información en tiempo real luego de producido el siniestro y
transmitiéndola a una unidad terrena quien será la encargada de evaluarla y
asignar los recursos para controlar la situación. También, los UAVs pueden
funcionar como repetidores de información, sobre todo en zonas de bajas
frecuencias de radio.
Una
de las características principales de los drones es que tienen una cámara que
gira y eso permite obtener imágenes nítidas y sin movimiento. Se pueden
instalar cámaras diurnas para el día e infrarrojas para la noche. Las imágenes
captadas son enviadas a las computadoras de un centro de control y monitoreo en
donde se supervisa el viaje aéreo.
En España existen
diferentes proyectos orientados a la lucha contra los incendios. La
empresa española Nitrofirex ha desarrollado un proyecto con estos aparatos
orientados a la extinción de incendios forestales y hasta seguir combatiendo el
fuego durante la noche. Una de las ventajas de este tipo de vehículos es que
permiten operar por la noche, cuando los aviones de extinción con tripulación
humana no pueden volar.
Experiencias
En Argentina se publicó en 2009 la noticia que a cargo
de la Dirección de Investigación, Desarrollo y Producción del Ejército
Argentino se desarrollaba desde hace un tiempo un sistema de aeronaves no tripuladas,
el sistema Lipan.
En
un trabajo conjunto, INTI - Electrónica e Informática estaban
desarrollando un
subsistema de seguimiento automático de antena para estas aeronaves no
tripuladas.La
aeronave construida por el Ejército tiene 3 cámaras de video, puede volar
a una altura de 2000 m.,
a una velocidad máxima de 170
Km. por hora, lo cual le permite una autonomía de 5
horas de vuelo y un radio operativo de 40 Km. desde su punto de despegue.
También la
Fuerza Aérea Argentina experimentó en varios prototipos de aviones pequeños no
tripulados para diversos fines, exploración, reconocimiento y experimentación.
Lamentamos
no se hayan utilizado para obtener datos o realizar vigilancia en temas
ambientales.
La
Escuela Superior de Ciencias Marinas de la Universidad Nacional del Comahue de
la localidad San Antonio Oeste adquirió un vehículo aéreo no tripulado VANT-,
también conocido como “drone”, “RO 200” de fabricación nacional destinado
principalmente a la investigación de las zonas marítimas, según informó Paul
Osovnikar, titular de la entidad educativa.
En
Costa Rica estos pequeños aparatos han colaborado inmensamente a mejorar el
trabajo de los investigadores del volcán Turrialba. Aquí, tres aeronaves no
tripuladas son capaces de sobrevolar y controlar el peligroso cráter sin que
los trabajadores corran peligro. Sus motores eléctricos pueden surcar las
peligrosas y contaminadas corrientes que cubren el cono gracias a que
“ingieren” poco aire. Además, están conectados con los satélites de la NASA
para crear al momento los mapas de concentración y distribución de gases
volcánicos.
En
Chile se ha desarrollado y elaborado en conjunto por el Ejército chileno, la
Universidad de Concepción y una empresa privada, la gran misión de Láscar (en
honor al volcán Láscar) que apunta al control de variables medioambientales y
climáticas, tales como el monitoreo de ríos y fuentes hídricas, erupciones volcánicas,
desastres naturales, operativos de rescate, monitoreo de incendios y
prospección pesquera.
En
México, Mauricio Bretón González, vulcanólogo integrante del Comité Científico
Asesor para el Volcán de Fuego de Colima, manifestó la posibilidad de usar
drones para la vigilancia volcánica, sobre todo en uno tan activo como el
Colima.
Los drones, se
están convirtiendo en herramientas prácticas e indispensables ya que son un sistema
confiable de obtención de información que no involucra vidas humanas, no
cometen errores en la toma de datos y no corren riesgos inherentes a la
vigilancia.
El desafío radica
en implementar en nuestro país lo antes posible la tecnológica
existente en materia de aeronaves no tripuladas, tanto para la
vigilancia volcánica como para los incendios forestales.
Ante el crecimiento
exponencial que ha mostrado la industria y el uso de los drones, se ve la
necesidad de establecer una legislación que permita su adecuado manejo y evitar
problemas que invadan la privacidad o atenten contra la seguridad.