LA SEÑORA DE LOS PIÑONES

Como nos encanta las ferias de artesanos por sobre cualquier shopping o centro comercial, no dejamos de visitar el paseo artesanal de Junín de los Andes. Para no ser poco, la ciudad cuenta con 2 paseos artesanales (a solo cuadras uno del otro), uno anexo a la oficina de informes turísticos y el otro atrás de la municipalidad.

Pasando por el cercano a Informes, más precisamente en el local de uno de los vértices, veremos que un cartel dice “alfajores de piñon”. Le recomendamos que se tome unos minutos y entre, Gladis lo atenderá y no solo le hará degustar unos riquísimos alfajores de ese fruto sagrado sino que les contará sobre el árbol milenario mapuche al cual el pueblo venera (el pehuén), sus frutos esenciales (los piñones) y como ella religiosamente prepara los alfajores autóctonos desde su cosecha hasta el mostrador del local.

La comunidad mapuche considera al pehuen sagrado y reza a su sombra. No aprovechaba su fruto hasta que según dice la leyenda, en una época de gran hambruna un joven, en busca de comida se encontró con un anciano de larga barba blanca y, ante el lamento del muchacho por no encontrar alimento, éste le hizo notar el don que su dios (Nguenechen) les enviaba, enseñándole su preparación y contestándole “haced buen acopio, guardadlos en silos subterráneos y tendréis comida todo el invierno”. Desde entonces no hubo más hambruna.

No dejen de conocer las delicias de esta lugareña y los secretos de este maravilloso fruto, su preparación y las historias que rodean a estas tierras.